martes, 10 de enero de 2012

Una mujer que llegó ser estrella.


Ruth Fernández falleció y dejó tras ella un legado y una vida que sirve de ejemplo a todas las futuras generaciones. "La negra de Ponce" como fue conocida vivió en una época dónde nada era fácil y no existian recursos como los que existen hoy para hacerse de una carrera en la artes. La cantante y actríz tuvo exíto en su pais y alrededor del mundo, porque nunca se conformó, nunca se acomodó demasiado, miraba al horizonte y quiso tocar el sol y lo hizo. "Gracias mundo", gracias Ruth Fernández.

De niña en su natal Ponce aprendió a tocar el piano, perdió a su madre cuando apenas tenía 3 años y fue criada por su abuela. Fernández nació en 1919 y ya para la década del 30 estaba cantando. En el 1941 y un año antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial, Ruth Fernández comenzó a ganar popularidad y firmó un contrato discográfico con la Columbia Records con quien grabó su primer éxito, "Cuando Vuelvas" un tema escrito por la compositora Myrta Silva. Su primera aparición en Nueva York fue en el teatro latino de Nueva York. Allí, el maestro de ceremonias, Héctor del Villar, la presentó como "El Alma de Puerto Rico Hecha Canción" (El alma de Puerto Rico hecha canción).



Cuando Fernández regresó a la isla, se inscribió en la Universidad de Puerto Rico con la intención de convertirse en una trabajadora social. Sin embargo, una vez más se unió a la banda, los "Whoopee Kids" y viajó con ellos a través del Caribe, América Central y del Sur.




Fernández fue el primer éxito puertorriqueño femenino, y como tal, rompió barreras raciales y los estereotipos. En una ocasión, la banda Los Woopie Kids fue contratada para llevar tocar en el Hotel Condado Vanderbilt (Hoy, Edificio que se encuentra al lado del Hotel La Concha). El director de la orquesta le dijo que de acuerdo a las normas del hotel,tenía que entrar por la puerta de la cocina como todos los otros músicos negros (de hecho, una regla de integración ilegal en el momento en Puerto Rico, pero todavía en vigor en el momento por el interés de mantener clientes americanos en el hotel). Ruth sin embargo, no siguió las instrucciones y entró por la puerta principal. Ella subió al escenario y ante una audiencia asombrada cantó dejando al público pidiendo más. Durante la Segunda Guerra Mundial y la Guerra de Corea, Fernández viajó al extranjero para entretener a los soldados de origen hispano.

Cuando regresó a Puerto Rico, decidió realizar una carrera como solista. En 1954, a los 41 años, Fernández participó en el primer show de televisión musical en la historia de Puerto Rico, "El Show de Libby".

La mujer Boricua en ser la "primera":
Ruth fue la primera mujer en cantar en una orquesta de Puerto Rico,
La primera mujer puertorriqueña en cantar música "popular" en el Metropolitan Opera House de Nueva York,
La primera cantante latina de la música romántica a cantar en los países escandinavos.
La primera latina en grabar con una banda de América del Norte.


Tuvo un programa radial con la CBS radio que se transmitió de costa a costa. Ella también actuó en el Carnegie Hall de Nueva York, Italia, Francia, España, Noruega, Venezuela, México, Panamá y Cuba.

Fernández también ha apareció en dos películas en español, y tiene un papel notable en el documental afro-puertorriqueña titulado "Raíces. Una artista vanguardista y una mujer que rompió con los esquemas establecidos para crear unos más justos.

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